La fiesta del softbol femenino ha tenido su buen comienzo este domingo 21 de mayo en el estadio de softbol del Centro Latino donde se reunieron los 7 equipos que se inscribieron en el congresillo para dar comienzo a lo que será una jornada de 46 juegos a desarrollarse a lo largo de los próximos 3 meses en la arena de la Ferrero Tamayo.

La cita fue a las 3 de la tarde y precisamente, cuando el reloj pasaba por ese lugar, los equipos se concentraron en las adyacencias del center field, con su respectiva madrina para marchar bajo los acordes de la banda Los Antaños de Palmira que le dieron un toque de espectáculo de grandes dimensiones, tal y como se lo habían propuesto los organizadores.

Después vino la espontaneidad de las jugadoras que con sorprendente creatividad supieron interpretar la propuesta de la Dirección de Deportes de organizar una presentación que naciera de la inmediatez. Así lo manifestó el público asistente que premió con sus aplausos cada una de las ejecuciones. Mención especial para las Cardenales de Cordero cuya inventiva les dio para un raspacanilla de ancianos en versión infantil.

El sorteo de la madrina recayó en la niña, Arantza Toloza, representante del conjunto Surti Medical, quien recibió la banda y el bouquet de flores de parte de las representantes del Comité de Damas del Centro Latino.

Seguidamente, el saludo del presidente del Centro Latino, José Ramírez y del Director de Deportes Hugo Hernández, para luego ir al sorteo de juegos, recayendo el honor de inaugurar a las divisas Team Olpas contra Sky, mientras que Las Bravas se citaban en el segundo compromiso a las locales Latinas. El juego de cierre le correspondió a los foráneos Cardenales de Cordero contra el fuerte representativo de Capacho.

Los primeros resultados arrojaron una amplia superioridad del conjunto de Sky sobre las debutantes Olpas Tem, mientras que Bravas disponían de Latinas en un encuentro emotivo y lleno de oportunidades para ambas divisas. El plato fuerte entre Cordero y Capacho fue suspendido a la altura del primer inning a causa de la lluvia que anuló las posibilidades de lograr una jornada perfecta.